El ODS 3 de las Naciones Unidas se centra en garantizar una vida saludable y promover el bienestar para todas las personas. Es esencial abordar estos aspectos a nivel local, donde se experimenta directamente el impacto en la salud y el bienestar.
El objetivo principal es asegurar una vida saludable, lo cual incluye prevenir y tratar enfermedades, promover la salud mental, brindar acceso a servicios de salud de calidad y reducir las desigualdades en salud. Este objetivo se relaciona estrechamente con otros ODS, como la erradicación de la pobreza, la igualdad de género, la educación de calidad y el trabajo decente.