A tan solo 15 kilómetros de la capital alicantina, Monforte del Cid ha sabido conservar su alma agrícola y su identidad ligada al cultivo de la uva de mesa, al mismo tiempo que impulsa un sólido tejido industrial y de servicios
El municipio alicantino es el primero de la provincia en obtener la certificación mODS en sostenibilidad ambiental, social y de gobernanza, auditada por Kiwa como tercera parte.
Entrevistamos a Juan José Hernández Rico, alcalde de Monforte del Cid, para conocer cómo este municipio ha logrado consolidar una gestión pública planificada, evaluable y colaborativa.
3 de noviembre de 2025 – Mar Viguer.
Monforte del Cid, Alicante.
«El desarrollo sostenible empieza en lo local, porque es en los municipios donde los retos se transforman en soluciones reales», señala Hernández Rico, convencido de que la certificación mODS es mucho más que un reconocimiento: «es una herramienta para medir, mejorar y demostrar que la sostenibilidad puede ser una política útil y cercana a la ciudadanía».
Desde la elaboración participativa de su Agenda 2030 local en 2022 hasta la puesta en marcha de proyectos como la Economía de los Cuidados, el Proyecto Respiro, los Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDS) o el fomento del empleo joven y la formación profesional, Monforte del Cid ha pasado de impulsar iniciativas dispersas a consolidar políticas planificadas y coordinadas.
Una gestión que, en palabras del alcade, «refuerza la transparencia, mejora la calidad de vida y demuestra que tradición y progreso pueden avanzar de la mano».
P: ¿Cómo describirías Monforte del Cid a alguien que no lo conoce y qué crees que hace diferente al municipio?
Juan José Hernández Rico: Monforte del Cid es un municipio de la provincia de Alicante, situado a unos 15 kilómetros de la capital. Tradicionalmente agrícola, ha sabido conservar su identidad ligada al cultivo de la uva de mesa, al mismo tiempo que en los últimos años ha impulsado un importante desarrollo industrial y de servicios.
Lo que hace diferente a Monforte del Cid es su capacidad para combinar tradición y modernidad. Mantiene vivas sus raíces culturales, con celebraciones tan emblemáticas como las fiestas de Moros y Cristianos, con más de 200 años de historia, o la tradicional romería hacia Orito en honor a San Pascual, un lugar de gran devoción y misticismo.
El municipio también posee un valioso patrimonio histórico y arqueológico: culturas íberas y romanas habitaron estas tierras, dejando numerosos hallazgos que hoy se conservan y exhiben en el Museo Íbero de Monforte del Cid.
Al mismo tiempo, Monforte apuesta con decisión por la innovación, la sostenibilidad y la mejora continua de la gestión pública
Juan José Hernández Rico: Las tradiciones y características locales que han servido de base para impulsar las iniciativas de sostenibilidad en el territorio están profundamente vinculadas al compromiso histórico del Ayuntamiento con el bienestar social, económico y medioambiental. A lo largo del tiempo, se ha priorizado la protección de la biodiversidad, el impulso a la economía local y la mejora del bienestar social a través de servicios fundamentales como la educación, la salud y la participación ciudadana.
Estas acciones, aunque en muchos casos se venían desarrollando de manera autónoma e inspiradas en valores locales, la decisión de unirse formalmente a una ruta estructurada permitió consolidar y potenciar estas iniciativas. De esta manera, se pasó de realizar acciones dispersas a actuaciones planificadas y coordinada.
P: ¿Qué supone para Monforte del Cid haber obtenido la certificación en los tres ámbitos de la sostenibilidad (social, económica y medioambiental) con el esquema mODS?
Juan José Hernández Rico: La obtención de esta certificación supone un gran avance para Monforte del Cid, ya que refleja el compromiso del municipio con un modelo de desarrollo local más justo, inclusivo y sostenible. Este reconocimiento en los tres ámbitos de la sostenibilidad (social, económica y medioambiental) certifica ante la población el esfuerzo y la implicación del Ayuntamiento por orientar sus políticas hacia un futuro más equilibrado y responsable.
En el año 2022 se elaboró un documento estratégico basado en un proceso participativo, en el que intervinieron vecinos, asociaciones, empresas y otros agentes locales. Gracias a la implicación de todos, se definieron una serie de propuestas y líneas de actuación que, con el tiempo, han comenzado a materializarse.
La certificación obtenida demuestra que aquellas ideas planteadas en su día no solo fueron escuchadas, sino que se que han transformado en acciones reales. Desde el Ayuntamiento seguiremos trabajando con el objetivo de desarrollar, de aquí a 2030, el mayor número posible de iniciativas.
P: ¿Qué beneficios ha traído esa certificación al municipio, a sus empresas y a sus vecinos?
Juan José Hernández Rico: La certificación ha traído múltiples beneficios tanto al municipio como a sus empresas y vecinos, derivados directamente de las actuaciones implementadas. Entre estos beneficios destacan la creación del programa de economía de los cuidados, que ha fortalecido los servicios de atención y apoyo a personas en situación de dependencia; el impulso a la formación profesional, que ha mejorado las oportunidades laborales y la capacitación e la población, entre otras. Las acciones llevadas a cabo han repercutido positivamente en la calidad de vida de la ciudadanía, promoviendo un desarrollo más equitativo, inclusivo y sostenible.
P: ¿Por qué consideras importante que los municipios se comprometan con la sostenibilidad y certifiquen sus avances?
Juan José Hernández Rico: Es fundamental que los municipios se comprometan con la sostenibilidad porque el desarrollo sostenible comienza en el ámbito local. Las ciudades y pueblos son los espacios donde se concentran gran parte de los retos ambientales, sociales y económicos, pero también son los escenarios clave para implementar soluciones efectivas. Al integrar principios sostenibles en sus políticas, servicios y planificación urbana, los municipios pueden mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, proteger el medio ambiente y fomentar un desarrollo económico responsable.
Además, la certificación de los avances en sostenibilidad no solo permite evaluar de manera objetiva el progreso alcanzado, sino que también refuerza la transparencia y el compromiso institucional.
La sostenibilidad requiere del compromiso de todos los agentes sociales, económicos y políticos. Los gobiernos locales tenemos un papel clave como motores del cambio, ya que estamos más cerca de la ciudadanía y pueden adaptar estrategias globales a las necesidades concretas de su territorio.
P: ¿Qué papel ha jugado la colaboración público – privada en el proceso de certificación y en la puesta en marcha de las iniciativas?
Juan José Hernández Rico: La colaboración público – privada ha sido clave en el desarrollo y la ejecución de muchas de las acciones recogidas en nuestro certificado. En los casos en que no contábamos con los recursos suficientes, la implicación de entidades privadas nos permitió cubrir esas necesidades. Sin su apoyo, no habría sido posible llevar a cabo numerosas iniciativas que han sido determinantes para la obtención de la certificación.
P: ¿En qué medida la formación y capacitación de técnicos y técnicas municipales ha sido clave para implantar con éxito las estrategias de sostenibilidad?
Juan José Hernández Rico: Actuar desde el conocimiento ha sido un pilar fundamental en la implantación de las estrategias de sostenibilidad. Desde el inicio del proceso de redacción de la Agenda Urbana 2030, entendimos que la formación del personal técnico era esencial. Redactar un plan carece de sentido si quienes deben ejecutarlo no cuentan con las herramientas y el conocimiento necesarios para hacerlo realidad.

P: ¿Cómo fue el proceso de obtener la certificación con el esquema mODS? ¿Y cuáles han sido los principales retos que tuvisteis que superar?
Juan José Hernández Rico: El proceso fue trabajoso, principalmente porque cada área municipal había desarrollado sus acciones de forma independiente, por lo que, de cara a la auditoría, fue necesario recopilar y sistematizar toda la información a las actuaciones realizadas. Afortunadamente, contamos con la colaboración de todos los departamentos, lo que permitió coordinar esfuerzos y presentar de forma conjunta el trabajo desarrollado, lo que fue clave para lograr la certificación.
El principal reto fue la elaboración de la memoria de sostenibilidad, ya que partimos prácticamente desde cero. A pesar del desconocimiento inicial, gracias al compromiso y al esfuerzo de nuestros técnicos, logramos desarrollarla con éxito y cumplir con los requisitos establecidos por el esquema mODS.
P: ¿Qué oportunidad diríais que tienen los municipios y los territorios para integrar la sostenibilidad en su gestión?
Juan José Hernández Rico: Los municipios y territorios contamos con una gran oportunidad para integrar la sostenibilidad en la gestión, ya que conocemos de primera mano las necesidades ambientales, sociales y económicas de su entorno. Esta cercanía nos permite diseñar políticas públicas adaptadas a su contexto local.
Además, tenemos la capacidad de incorporar criterios sostenibles en la toma de decisiones tanto en la prestación de servicios como en la gestión de recursos. Afortunadamente, disponemos de acceso a fondos de financiación específicos que facilitan la puesta en marcha de proyectos sostenibles en todos los ámbitos.
P: ¿Qué mensaje le daría a otros alcaldes o técnicos que aún no han comenzado procesos de certificación como el esquema mODS?
Juan José Hernández Rico: Les animaría a iniciar el proceso de certificación, ya que resulta una herramienta muy útil para conocer con precisión el estado real de las actuaciones planteadas en su hoja de ruta hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Aunque en ocasiones puede resultar difícil priorizar acciones o hacer el seguimiento de su avance, el esquema Mods permite ordenar, evaluar y comunicar de forma clara los progresos realizados. Además, aporta un valor añadido fundamental, el refuerzo de la transparencia.
P: En relación con el programa de Economía de los Cuidados, tenéis en marcha el proyecto Respiro, dentro del Plan Estratégico de Servicios Sociales. ¿Qué impacto está teniendo en la atención a personas mayores con deterioro cognitivo y en el apoyo a sus familias?
Juan José Hernández Rico: El Proyecto Respiro está teniendo un impacto positivo tanto en las personas mayores con deterioro cognitivo como en sus familias.
Para las personas mayores, el proyecto proporciona una atención especializada que contribuye al mantenimiento de su autonomía en las actividades de la vida diaria, estimula y preserva sus capacidades cognitivas, refuerza la autoestima y favorece un estado psicoefectivo adecuado.
Al mismo tiempo, las familias cuidadoras reciben un importante apoyo. El programa les ofrece un alivio temporal en las tareas de cuidado, así como acompañamiento social y psicológico, orientación personalizada y asesoramiento sobre los recursos sociales disponibles que pueden mejorar su calidad de vida y la de sus familiares dependientes.
El proyecto mejora el bienestar de las personas mayores y fortalece la red de apoyo a sus cuidadores, promoviendo un enfoque integral.
P: Contáis con el III Plan de Igualdad en ejecución y con acciones regulares en marcha. ¿Qué acciones desarrolladas destacarías dentro del programa de igualdad?
Juan José Hernández Rico:
– Promoción de proyectos Coeducativos en centros y espacios educativos del municipio.
– Fomento del asociacionismo de mujeres y jóvenes para garantizar su presencia en los espacios de participación y toma de decisiones.
– Servicios destinados a la ciudadanía en general para facilitar la conciliación de la vida personal, familiar y profesional.
– Sensibilización en la promoción de la Conciliación laboral y la Corresponsabilidad para generar en la ciudadanía un cambio de los roles tradicionales entre mujeres y hombres.
P: Habéis desarrollado un proyecto con IVACE para implantar Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible en el polígono industrial. ¿Qué beneficios concretos ha supuesto esta actuación en términos de gestión del agua y adaptación al cambio climático?
Juan José Hernández Rico: La implantación del sistema de captación y reutilización de aguas pluviales en el Polígono Industrial Las Norias UBZ – 8 ha permitido utilizar este recurso para el baldeo de las calles, reduciendo así el consumo de agua potable. Además, este sistema contribuye a mitigar el riesgo de inundaciones al favorecer el control del caudal en episodios de lluvias intensas, mejorando la resiliencia del entorno a efectos del cambio climático.
P: ¿Qué programas o proyectos de apoyo al emprendimiento o al empleo joven han funcionado?
Juan José Hernández Rico: En el ámbito del emprendimiento, una de las opciones más efectivas ha sido el asesoramiento personalizado. Este servicio permite a los emprendedores desarrollar su idea de negocio de forma concreta, contando con el apoyo de un técnico especializado. El asesoramiento incluye información sobre ayudas disponibles, identificación de locales disponibles, y otros recursos fundamentales para poner en marcha un proyecto empresarial.
En cuanto al empleo joven, la creación de módulos formativos en el IES Las Norias adaptados a las actividades económicas del municipio ha demostrado ser una medida eficaz para fomentar la empleabilidad y dinamizar la economía local. Asimismo, desde la Agencia de Desarrollo Local, se organizan cursos especializados en función de la demandad del mercado laboral. Un ejemplo destacado es el curso de Prevención de Riesgos Laborales para trabajadores/as del sector de la construcción, que se ha impartido en respuesta al creciente interés por parte de las empresas y personas en búsqueda de empleo en este sector.
P: De todas las acciones puestas en marcha, ¿Cuál ha sido la más compleja de implementar?
Juan José Hernández Rico: De todas las acciones puestas en marcha, la más compleja de implementar ha sido la elaboración y ejecución del Plan de Formación y Sensibilización en materia urbana.
El principal reto no ha sido la implicación ciudadana, sino la necesidad de acercar el concepto de sostenibilidad y la Agenda 2030 a la realidad local, especialmente a los sectores más vinculados al entorno rural y productivo. En contextos como el de Monforte del Cid, donde la agricultura tiene un peso esencial en la economía y la identidad del municipio, es fundamental que las políticas de sostenibilidad se comprendan desde la experiencia directa de quienes viven y trabajan el territorio.
En un primer momento, existía cierta distancia o desconocimiento sobre cómo los objetivos globales podían aplicarse de forma práctica y beneficiosa en el ámbito local. Por ello, la creación de talleres formativos y espacios de diálogo en torno a los Objetivos de Desarrollo Sostenible ha sido clave para traducir esos principios internacionales a acciones concretas, realistas y adaptadas a las necesidades del municipio.
Gracias al proyecto Generación Monforte 2030, se ha conseguido tender puentes entre el ámbito técnico, el social y el productivo, favoreciendo una comprensión más cercana y equilibrada de la sostenibilidad, donde desarrollo, tradición y progreso puedan avanzar de la mano.



